Invitados a D/C

 Visita de Gerardo Mosquera

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 Visita de Luis Camnitzer

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Visita de Georgia Quintas

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Visita de F. Mejía y M. Rodríguez Sepúlveda para Emergía/Córdoba

Conocí el proyecto Emergía en su presentación de Belo Horizonte, en la MIP 2, organizado por Ceia, en Agosto 2009. Además de asistir como espectadora al MIP 2, mi intensión era generar nuevos lazos y conocer otros proyectos. Esto fue muy fácil de lograr con los participantes y organizadores de este extraordinario encuentro de performance. Los proyectos en colaboración surgieron con tal fluidez, hablados sobre las mesas del restorán montado en el mismo lugar de la muestra al que todos concurríamos a comer y tomar. Allí conocí a Miguel Sepúlveda, intercambiamos nuestros proyectos enseguida y nuestros e-mails.

En ese momento estábamos dando cierre a una etapa del proyecto “Demolición/Construcción” (D/C), que había tomado como objeto de reflexión por dos años una casa que sería demolida, proyecto que patrocinó el Centro Cultura España de Córdoba (CCEC) y Aecid, D/C colaboró dando en el CCEC un taller de formación trabajando de modo horizontal con un grupo interdisciplinar de jóvenes autores, nuestra propuesta fue hacer una experiencia de comunicación con estos jóvenes, como veníamos trabajamos en D/C. Esta taller se llamó en su etapa inicial “Proceso”, propusimos invitar autores que ya tuvieran obra importante, para que pudiéramos charlar de sus procesos de trabajo, uno de estos invitados fue el proyecto “Emergía”, quienes cuentan con apoyo de la F. P. Claus para una parte de su proyecto. Los centros cultura España de Buenos Aires y de Córdoba colaboraron para que “Emergía” tuviera cabida dentro del programa D/C. También pudimos arreglar con los organizadores de “la semana del arte” en Rosario y dos meses después de ese encuentro en el café del MIP 2, Miguel y Fernanda empezaron la demolición de íconos en Argentina primero en Rosario, dentro del programa de este importante evento cultural organizado por los principales museos de esa ciudad. Siguieron luego en Córdoba, dentro del programa “proceso” de D/C, que como proyecto artístico en la instancia de exhibición basa sus principios en la interacción entre autores y público. E hicieron la despedida de Argentina desde provincia de Bs As, en el taller “Zona Imaginaria” de Lucrecia Urbano, que también es un proyecto artístico independiente con importante trabajo social.

Hablaré de “Emergía/Córdoba” que es el que he vivenciado y del cual me he sentido anfitriona en la ciudad. Decidí estar activamente en esta presentación, me interesa mucho interactuar también fuera de lo teórico, poniendo el cuerpo para obtener más elementos e interiorizarme en un proyecto. Así fue que me presenté como “corredora”, elegí el ícono, éste fue dibujado por Miguel en mi espalda, luego estuve un buen rato esforzándome frente a la pared blanca, hasta por fin lograr las condiciones para que se materializara la pieza: los calcos en papel de algodón del ícono sudado tomados por Fernanda. Fue una experiencia de entrega, de comunicación desde adentro con la pieza y sus autores… mientras corría no llegué a reflexionar sobre el icono que elegí, sino que pensé que estaba viviendo algo que por mucho tiempo no me pasaba, tenía que ver con sentir la energía del grupo, ser parte del engranaje de un aparato que me superaba como pensamiento individual… pensé en el azar, en lo todo lo que tuvo que ocurrir para… en lo rápido que los eventos se suceden, ¿cómo hacer para aprehenderlos mejor, capitalizarlos, trasformarlos?

Como dijo Bourriaud: “¿qué se puede hacer con?”.

 

Luego de esta presentación Fernanda y Miguel, hicieron un aporte al proyecto D/C, teníamos una programación, como veníamos haciendo en la casa a demoler, que duraba todo un día y un solo día. Y además era la despedida de ese objeto tomado por 2 años como disparador del proyecto.

Al comienzo Fernanda y Miguel pensaron en una acción conjunta… pero a medida que los días pasaron fueron interiorizándose en el proyecto D/C, su historia, las anteriores participaciones… hicieron un proceso veloz y cada uno optó por hacer su pieza.

La propuesta de Fernanda, “sin título (sírvase de la cebolla)”, una acción que ella iniciaba e invitaba al público a acompañarla, en la que hubo mucha participación y generó sentimientos varios en todos nosotros, no es habitual por aquí que un artista invite al público a llorar y que el público tome la invitación! Como yo veo esta pieza dentro del recorrido de D/C, es la pieza del necesario duelo, la despedida de la demolición que tanto nos había dado… mientras me servía de la cebolla pensé que nosotros no hemos podido revertir su estatuto de “demolición”, pensé en que esta apropiación que ella hizo del “tambor de hojalata” tenía un sentido que conectaba con el proyecto y su recorrido, a la vez que la conectaba a ella con una demolición íntima que había decidido compartirla con total apertura, creando una real comunicación, dándose en una entrega generosa.

Miguel propuso “Participación en D/C”, invitó a Rosa a cocinar y compartir unas recetas de dulces muy sencillas a partir de particulares ingredientes. Rosa pertenece a la “Asociación de ex-presos políticos de Córdoba”, la conozco hace unos 25 años, pero es hasta hace poco que puedo conocer a la Rosa militante, ya que es muy reciente aquí que las víctimas sobrevivientes puedan accionar en público. Un día fuimos al Archivo Provincial de la Memoria, ex-centro clandestino de detención, allí había una exhibición de objetos realizados por los presos políticos en los campos de concentración, Rosa estaba de guía allí, la presenté con Fernanda y Miguel, hablamos del nuevo proyecto que ya habíamos empezado a desarrollar en D/C y consistía en trabajar sobre los ex-centros clandestinos de prisión de Córdoba de la pasada dictadura, con la asociación y el archivo. Ella ha sido nuestro nexo para dar inicio a este proyecto. El día de la acción Rosa llevó a dos mujeres más de la asociación, Gladys e Isolina (ésta última que vive en Ushuaia estaba casualmente en Córdoba para testificar en los juicios a los dictadores que por esos días se estaban llevando a cabo) ellas nos contaron motivaciones que se generaban para no perderse a sí mismas dentro de aquella terrible experiencia, como lograr hacer un pastel de cumpleaños a partir de migas de pan. No tengo palabras (o debería extenderme mucho) para contar lo que fueron esos 40 minutos, los relatos de tres mujeres enteras dispuestas a compartir las recetas/excusas para que pudiéramos comunicarnos como seres humanos.

Valoro mucho la gran sensibilidad de Miguel, como acción de aporte dentro del proyecto D/C, hizo la “bisagra” entre lo que dejamos (la casa a demoler) y el próximo proyecto, nos regaló un nexo, una puerta para salir de la demolición de la casa a otras demoliciones que si bien ya habíamos empezado a trabajar, aún no tenía ninguna pieza concreta, la de él es la primera.

Emergía/Córdoba, fue más allá de su propósito de hacer una ciudad más… fue un tres por uno!

Fue una experiencia en todo lo que pudimos compartir y en el que muchas personas hemos ganado valiosas reflexiones. Generado por el azar de los encuentros de personas que están comprometidas con sus trabajos e interesados en los de otros como forma elegida de aprendizaje y resistencia ante las diferentes crisis.

Agradezco a todo aquél que directa o indirectamente ha hecho posible lo realizado, ya que se trata de un trabajo de colaboraciones que ya ha dado frutos, además de sembrar muchas ideas y pensamientos nuevos. Y por sobre todo ha vinculado personas y proyectos.

La reunión de personas era condenada en la dictadura, así como eran castigadas las risas o charlas en los centros clandestinos en los que tuvieron encerrados ilegalmente a jóvenes estudiantes y trabajadores, de quienes dispusieron indignamente y volvieron trágico el desarrollo natural de una sociedad que temió cambiar o experimentar nuevas maneras de construirse.

La reunión es ahora, además de un bálsamo, nuestra posibilidad de diálogo para re-pensarnos, para conocernos, comunicarnos, dar y recibir sanamente.

En D/C invitamos a explorar demoliciones presentes para poder hacer de ellas construcciones contemporáneas. Fernanda y Miguel son de los que se involucran realmente en lo que hacen, se abren a compartir, se adaptan a las situaciones con propuestas claras. Nos dejan su valioso aporte. Esperamos seguir construyendo el puente entre nuestros “desde aquí”.

Graciela De Oliveira, Enero 2009.